El Libro
Blanco de la profesión docente y su entorno escolar fue encargado en el año
2015 a José Antonio Marina por el Ministerio de educación. En él el autor, filósofo
y pedagogo, nos transmite su idea de la situación de la educación española
proponiendo varios cambios y modificaciones para su mejora. El hecho de que una
obra recoja de modo tan sustancial las necesidades que posee a día de hoy la educación
me parece así mismo un reflejo de la situación
actual de dicho ámbito. Bien es cierto que al menos en contraposición a las décadas
pasadas hoy parece que la educación ha alcanzado cimas que hace décadas se veían
lejanas; todo el mundo o prácticamente todas las personas en una situación social
corriente o normal consideran que el valor de aprender es importante, aun sin
que ellos lleven a cabo dicho ejercicio.
Sin embargo no podemos perder el horizonte
y llevarnos al engaño pensando que todo está hecho ya. Aun a día de hoy y de
hecho cada vez de forma más acentuada, el peligro de la desinformación o la
falsa información impulsado por los medios de comunicación, las redes sociales
e internet ha crecido de forma muy considerable. Por este motivo, y a mi
parecer, dicha obra si bien no puede, o más bien no debe, ser tomada como la
única obra de referencia del mismo modo que ninguna otra en el ámbito educativo,
no podemos dejar de valorarla y aplaudirla de tanto en cuanto ayuda a fomentar
muchos de los valores en los que todos creemos y de los que todos queremos
nutrirnos.
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